Ficha de esta etapa:
Fecha 17-Abril-2010
Origen: Catedral de la Almudena
Destino: Estación de Cercanias de Cantoblanco
Longitud: 20 km
Desnivel: 100m
Track de GPS: hhttp://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=851501
Empezamos el día con bastantes dudas, ya que las previsiones del tiempo durante la semana estaban pronosticando lluvias para el sábado 17, primer día de la ruta, al final viendo que lo que es esperaban eran lluvias dispersas y no demasiado fuertes decidimos, llevándonos paraguas, seguir con la fecha marcada, no era plan en la primera jornada no ser capaces de vencer los obstáculos.
Un poquito mas tarde de lo que nos hubiera gustado, a las 10:15, estábamos en la plaza de Oriente y entramos en la Catedral de la Almudena, ya que en la Iglesia de Santiago habíamos estado el fín de semana anterior. Tras una corta visita, sobre las 10:45 empezamos nuestra marcha.
Dentro de Madrid, aunque llevo el GPS encendido para recoger el trayecto, no hubo necesidad de consultarlo ya que conocemos las calles, fuimos por Sol, Alcalá, Recoletos, Castellana y plaza de Castilla.
En Plaza de Castilla, según lo que había visto en internet, están las primera flechas amarillas que indican la dirección a seguir. La primera aparece en una farola junto a la cafetería Rodilla, con lo que aprovechamos para tomarnos un café y realizar una primera parada tras los 9 km recorridos antes de empezar a seguirlas. cada pocos metros, y sobre todo en los cruces se encuentran las flechas que nos marcan el camino: rodeamos La Paz, llegamos al hospital Ramón y Cajal, seguimos por Fuencarral, atravesamos la carretera de Colmenar por una pasarela y llegamos al PAU de Monte Carmelo, donde en un parque y como ya eran las 14:30 y no llovía paramos a tomarnos unos pequeños bocatas.
Finalizado el descanso, y siempre siguiendo las marcas amarillas pasamos junto al cementerio de Fuencarral y cruzando las vías y M40 por unos pasos subterráneos salimos definitivamente de la zona urbana de Madrid. A partir de dicho momento el recorrido transcurre por sendas en mitad del campo, que estaba por cierto precioso lleno de flores amarillas por las lluvias de los últimos días.
El camino marcado conduce hacía Tres Cantos, pero a la altura de la clínica Sear, nos desviamos para llegar a la estación de cercanías de Cantoblanco y ya en tren, de regreso a Sol y vuelta a casa.
El tren lo tomamos de regreso a las 16:30 y en un trayecto de 20 minutos recorrimos lo que habíamos andado en 6 horas (con paradas), menuda diferencia.
Con respecto a la lluvia, si exceptuamos un par de km mientras cruzábamos el el Hospital Ramón y Cajal que tuvimos que sacar los paraguas, y un pequeño tramo antes de llegar a la clinica Sear, el resto tuvimos un día muy agradable, ya que las nubes impidieron que pasáraramos calor.
Como anécdota, que nos hará aprender para otras ocasiones, en una zona del camino nos encontramos con un charco tan grande que no había forma de seguir sin mojarse y no podíamos rodearlo porque las vallas de las fincas colindantes nos lo impedían. Finalmente lanzando unos pequeños trozos de madera que encontramos cerca pudimos preparar una pequeña zona de paso, aunque no imipidieron que alguna zapatilla se mojara. Experiencia para otras ocasiones, llevar un par de bolsas de plástico, que no aumentan el peso de la mochila, pero que nos permitan protegernos las botas y cruzar sin mojarnos.
Un poquito mas tarde de lo que nos hubiera gustado, a las 10:15, estábamos en la plaza de Oriente y entramos en la Catedral de la Almudena, ya que en la Iglesia de Santiago habíamos estado el fín de semana anterior. Tras una corta visita, sobre las 10:45 empezamos nuestra marcha.
Dentro de Madrid, aunque llevo el GPS encendido para recoger el trayecto, no hubo necesidad de consultarlo ya que conocemos las calles, fuimos por Sol, Alcalá, Recoletos, Castellana y plaza de Castilla.
En Plaza de Castilla, según lo que había visto en internet, están las primera flechas amarillas que indican la dirección a seguir. La primera aparece en una farola junto a la cafetería Rodilla, con lo que aprovechamos para tomarnos un café y realizar una primera parada tras los 9 km recorridos antes de empezar a seguirlas. cada pocos metros, y sobre todo en los cruces se encuentran las flechas que nos marcan el camino: rodeamos La Paz, llegamos al hospital Ramón y Cajal, seguimos por Fuencarral, atravesamos la carretera de Colmenar por una pasarela y llegamos al PAU de Monte Carmelo, donde en un parque y como ya eran las 14:30 y no llovía paramos a tomarnos unos pequeños bocatas.
Finalizado el descanso, y siempre siguiendo las marcas amarillas pasamos junto al cementerio de Fuencarral y cruzando las vías y M40 por unos pasos subterráneos salimos definitivamente de la zona urbana de Madrid. A partir de dicho momento el recorrido transcurre por sendas en mitad del campo, que estaba por cierto precioso lleno de flores amarillas por las lluvias de los últimos días.
El camino marcado conduce hacía Tres Cantos, pero a la altura de la clínica Sear, nos desviamos para llegar a la estación de cercanías de Cantoblanco y ya en tren, de regreso a Sol y vuelta a casa.
El tren lo tomamos de regreso a las 16:30 y en un trayecto de 20 minutos recorrimos lo que habíamos andado en 6 horas (con paradas), menuda diferencia.
Con respecto a la lluvia, si exceptuamos un par de km mientras cruzábamos el el Hospital Ramón y Cajal que tuvimos que sacar los paraguas, y un pequeño tramo antes de llegar a la clinica Sear, el resto tuvimos un día muy agradable, ya que las nubes impidieron que pasáraramos calor.
Como anécdota, que nos hará aprender para otras ocasiones, en una zona del camino nos encontramos con un charco tan grande que no había forma de seguir sin mojarse y no podíamos rodearlo porque las vallas de las fincas colindantes nos lo impedían. Finalmente lanzando unos pequeños trozos de madera que encontramos cerca pudimos preparar una pequeña zona de paso, aunque no imipidieron que alguna zapatilla se mojara. Experiencia para otras ocasiones, llevar un par de bolsas de plástico, que no aumentan el peso de la mochila, pero que nos permitan protegernos las botas y cruzar sin mojarnos.
Siguiente etapa: Cantoblanco-Colmenar
Pues sí, Javier, un par de bolsas de basura resisten más de lo que pudiera parecer, y si son de las grandes mejor, que pueden tener otros usos y sacarnos de algún "apurillo".
ResponderEliminarSalu2 y ánimos
ppcampillo